Hoy hice mi práctica número 20 y ya tengo fecha para el examen práctico: será el próximo miércoles 19 de noviembre. Me queda poco para estar frente al examinador y lo cierto es que aún no tengo plena confianza en poder aprobar. Hoy cometí dos errores eliminatorios y varios leves. No fue un día malo, pero cada error ya supone una puñalada porque sé lo cerca que estoy del examen.
Antes de comenzar la práctica, el profesor me estuvo enseñando las comprobaciones previas. Aprendí cómo abrir el capó, con la palanca que está en la parte inferior izquierda del coche, y luego a sujetar el capó con la varilla. Identifiqué el depósito del líquido del limpiaparabrisas, el depósito de refrigerante, el depósito de aceite, la varilla del aceite, el depósito del líquido de frenos, la batería y los fusibles. Al terminar cerré el capó dejándolo caer desde una altura un poco elevada.
Los errores más destacados de esta práctica fueron los siguientes:
- De nuevo olvidé encender las luces antes de iniciar la marcha, y quitarlas antes de apagar el motor al terminar.
- Iba olvidando colocarme el cinturón de seguridad, pero miré el salpicadero y vi el indicador. Es conveniente mirar el salpicadero del coche, porque te indica cómo está el freno de mano, el cinturón, las luces, etc. Si tiendes a olvidarte estas cosas, al menos no olvides mirar en el salpicadero tanto al empezar como al terminar.
- Se me pasó una entrada en una rotonda, que no vi porque estaba muy al principio.
- Se me caló el coche dos veces en una calle llana sin mayor dificultad. El profesor me echó la reprimenda diciéndome que a estas alturas no debería tener esas caladas. Tiene razón, y ya no tuve más caladas desde que me lo dijo.
- En la entrada a una rotonda miré demasiado a lo lejos y entré excesivamente confiado. Un coche que venía muy rápido se pasó la rotonda casi recto y se cruzó delante de mí. El profesor tuvo que frenar.
- En la entrada a otra rotonda estaba tan atento a la circulación que no vi a un peatón que estaba esperando en el paso de peatones anterior a la rotonda.
- En una calle muy estrecha de doble sentido me crucé con un coche y seguí a baja velocidad, pero el profesor me dijo que lo mejor era parar y calcular bien la distancia lateral porque el espacio era mínimo.
Practiqué un estacionamiento en línea, que me salió bien en solo dos maniobras, aunque el profesor me dijo que lo habría tenido mejor alineado si hubiera parado el giro final un poco antes.
Como anécdota, hoy transporté a una chica atrás, y en ese trayecto no cometí ningún error. No sé si el hecho de llevar a alguien más (aparte de mi mujer, que siempre viene), me hizo esmerarme más o tener más cuidado. Espero que en el examen sea igual.
Las dos últimas prácticas las he acabado con una sensación agridulce. Por una parte estoy viendo que ya soy capaz de circular con soltura y normalidad, pero por otra compruebo que sigo cometiendo errores que en el examen me pueden costar el suspenso. Todavía no he tenido una sola práctica limpia de errores, y eso me preocupa. Ya voy a poder dar pocas prácticas. Mañana no será posible, y tal vez el domingo pueda dar dos más y la próxima semana otras dos antes del examen.