Consejos para conducir tras un año de práctica

Anticiparse

Aprende a anticiparte a los acontecimientos. El arte de la anticipación permite intuir lo que va a pasar. Ver a ese conductor titubeante que tienes a tu derecha y saber con cinco segundos de antelación que va a invadir tu carril sin señalizar. Ver a ese chico a cierta distancia de un paso de peatones y saber que va correr hacia él para pasarlo. Ver a ese coche que entra a “saco paco” por el carril de aceleración de la autopista y saber que se te va a meter por delante y no va a respetar tu preferencia.

¿Por qué lo sabes? ¿Eres adivino? No. Lo sabes porque lo has visto ya varias veces. Porque puede suceder, y lo que puede suceder, a veces, sucede. Si quieres conducir bien necesitas ser un poco pesimista y estar constantemente imaginando lo peor tanto del resto de conductores como de ti mismo. También necesitas buena memoria y capacidad para aprender de tus propios errores y de los errores de los demás.

La capacidad de anticipación va a depender en gran medida de la atención que vayas prestando a la conducción. Aunque tengas buenos reflejos y seas capaz de adelantarte a las situaciones que pueden producirse, eso no te valdrá de mucho si tienes unos segundos de distracción. Hazme caso: bastan solo unos segundos para que se produzcan terribles desgracias. Por eso debes mantenerte atento todo el tiempo, evitando desviar la mirada a otra cosa que no sea lo que tienes delante y los espejos retrovisores.